Amor o Apego?
Mientras esperaba inútilmente ante la puerta del apartamento esperando que Fidel se dignara abrirle, Santiago se recriminada por la debilidad de su carácter cuando se había prometido a si mismo que no toleraría una mas de las rabietas del hombre con el que andaba saliendo desde hacía casi cuatro años.

Ciertamente entre los dos había "algo"... Santiago sentía que Fidel aún lo deseaba aunque ya no le despertase las mismas pasiones ardientes de cuando se conocieron; reconocía que había sido aceptado en su exclusivo círculo social, así al principio no le parecieran nada diferente a un grupo de locas cuarentonas de estrato seis, amantes del chisme y proclives mandarle la mano al menor descuido.
Santi no vivía con su familia; nunca logró hacer buenas migas con su padre y luego del divorcio solo se habían visto unas cuantas veces, de otra parte su madre andaba tratando de reorganizar su vida al lado de un hombre bueno pero simple, que ya había tenido suficiente lidiando con los problemas de adolescencia de su propio hijo para encima tener que soportar un hijastro abiertamente hostil y para mas señas... maricón.
Fidel no le alentó para que abandonara su casa y tampoco le sugirió que se mudara a su apartamento; nunca mostró demasiado interés por conocer las condiciones en las que vivía ni se ofreció ayudarle a pesar de ser evidente que su exiguo salario a duras penas alcanzaba para cubrir sus estudios y pagar un modesto alquiler. Aunque Fidel lo llamaba constantemente para comentarle los últimos acontecimientos del día no sentía necesidad de verlo hasta el fin de semana cuando con muy escasas excepciones se repetía el mismo libreto de reuniones con sus amigotes, algo de rumba, licor y sexo.

Este arreglo que aparentemente funcionaba tan bien para Fidel no lograba satisfacer a Santi que sentía como su vida se consumía a fuego lento en el agua tibia de una relación que no conducía a ninguna parte; no es que Santiago fuera muy exigente y hasta cierto punto la situación era manejable si no fuera por los frecuentes estallidos de ira de su compañero.
En esas andaba pensando mientras aguardaba que Fidel finalmente le abriera o por lo menos le contestara la llamada así fuera para insultarle y nuevamente mandarlo a los mil demonios; a estas alturas ya no importaban las razones por las cuales se molestó y salió de la disco como una tromba dejándolo confundido y con un extraño sentimiento de culpa. Ya le conocía y sabía que Fidel lo ignoraría hasta que se le bajaran los humos, sin embargo no se decidía a retirarse y seguía (como un idiota) esperando ante la puerta.

Llegó a su casa con las últimas estrellas de la noche y los primeros buses de la madrugada; en su cama repitió nuevamente el mismo juramento que había pronunciado tantas veces de no permitirle a Fidel que lo humillara mas, que se merecía algo mejor, que no lo necesitaba y otras cosas parecidas.... Sin embargo en los instantes finales de lucidez antes de caer vencido por el sueño, esa voz interior le advirtió desde lo mas hondo de sus entrañas lo que en sano juicio era incapaz de aceptar: Mañana Fidel le llamaría acongojado con las mismas promesas de cambiar, jurándole que le quería y que no podía vivir sin el.... y Santi (como siempre), no tendría el valor de romperle el corazón y el ciclo tantas veces repetido empezaría de nuevo.
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Me aburre sobremanera que las manidas historias de telenovela se reproduzcan en la selva de cemento; el caso de la heroína joven, sumisa y pobre ya es un cuento viejo... Desafortunadamente en la vida real este culebrón nunca tiene un final feliz.

Algunos más sarcásticos dirán que en este mundo hay hombres muy vivos que prosperan porque seguramente se aprovechan de la abundante cosecha de tipos (bobos) buenos.
Comentarios
Como siempre, la narrativa te luce muy bien.
Con todo mi respeto, si juntamos este post con el mas reciente de la Dra. Priscila, hacen complemento casi al dedillo.
Para mi a Santi y a Fidel los unía la costumbre, la costumbre del uno de hacer pataleta y del otro cediendo mas, mas, y mas.
O sería el eterno juego del perrito que juega a perseguir su cola?
Tal cual como vos decis, es similar a un circulo vicioso, un pequeño punto en la historia de la humanidad que se repetira una y otra vez, todo eso impulsado por fuerzas diferentes aunque adyacentes al amor y al apego.
Un abrazo
Excelentemente buenisimo.
Saludos.
Palabras sabias Sr Monchis, ojalá la sabiduría viniera en sobres, tantos seríamos menos tontos!...
Fielmente su lector
Prídamo...
Fidel y Santiago pueden llegar a ser uno, en algun momento de la vida de cada uno. Es decir, ficción o realidad cada uno de nosotros ha vivido el lugar de los protagonistas de tu historia.
Los giros y recurso empeados en la historia, son el común denominador de muchos, y especificamente de algunas historias vividas por nosotros. El final impecable, y la reflexion sobre los bo..(¿vi?)..bos es una genial con sello propio
un abrazo
Y para no gustarte la novela, se te da muy bien el asunto.
Excelente tema y gran narrativa, me alegra que estes publicando de nuevo, un abrazo gigante.
Excelente tema y gran narrativa, me alegra que estes publicando de nuevo, un abrazo gigante.
Chau...
A muchos les fascina, o viven en un mundo de fascinación que los enceguece y no los deja ver que, estan siendo bobos con un vivo al lado. Y esto es tan común.
Saludos
Un abrazote.
Es una real dicha y toda una satisfacción cuando los buenos se encuentran y los falsos buenos se quedan en la orilla viéndolos ser felices. Suele también frecuentemente suceder no?
Abrazo!