Mi primera vez

Conocí a M en el gimnasio.

Ocurrió en un momento muy particular en mi vida.... recién había terminado la Universidad y aunque sabía que mi vida cambiaría, nunca me imaginé hasta que punto ni de que manera.

De un momento a otro me quedé en el limbo; yo he sido mas bien solitario, pero la vida de estudiante me rodeó de gente con la que conviví durante toda mi infancia y juventud, no puedo decir que no tuviera amigos, sin embargo mis compañeros nunca dejaron de ser eso: simplemente compañeros de clase, estudio, juegos y luego en la universidad compañeros de cine, cervezas, paseos y algunas veces de rumba, yo siempre me sentí fuera de lugar en todas partes.

Al iniciar mi vida laboral fuí perdiendo el contacto con casi todos mis antiguos amigos y simplemente cambié los compañeros de clase por compañeros de oficina; me tocó superar mi natural timidez y comenzar a socializar en el único ambiente que ya conocía: el gimnasio.

Yo le cogí amor el ejercicio en plena Universidad, nunca me gustaron los deportes de grupo: no sirvo para correr y matarme a pata detrás de un balón, no tengo el espíritu combativo necesario para los deportes de contacto; sólamente me gustaba la natación y a fé que lo hacía bastante bien.

Pero me estoy llendo por las ramas.... estaba diciendo que le cogí entusiasmo al gimnasio cuando buscaba en qué y con quién llenar mis horas de ocio y soledad al salir del trabajo y le empecé a meter a las pesas con todo... sin embargo esto es mejor con un buen compañero que le ayude a uno y lo anime... y en este punto de la historia fué donde apareció M.

Yo lo conocía de vista y a veces hasta le respondía el saludo, cualquier día me preguntó no sé que cosa de algún ejercicio que estaba haciendo y me oidio oermiso para compartir la máquina y comenzamos a entrenar juntos, durante la rutina me preguntó que tipo de ejercicios me gustaban, que si trabajaba o estudiaba y cosas de esas; quedamos de seguir ejercitando juntos siempre que nos encontráramos por allá.

De este encuentro casual se inició una rutina diaria y poco a poco fuí conociendo a sus amigos y amigas.... en esa época yo andaba dizque de novia, que visto desde estas alturas de mi vida era algo así como una "amiga-novia-compañera", el hecho fué que empezamos a salir M con su amiguita de turno, mi "novia" y yo.

Al parecer todo andaba bien, pero de pronto M empezó a salir con una niña que aparentenemente se estaba interesada seriamente en él; yo por mi parte saliendo con mi amiga-novia-compañera veía como M se daba los besos mas apasionados con su novia, y yo sin tener una razón que considerara lógica en ese momento, me empezaba a sentir celoso que le dedicara mas atención a ella que a mí.

Mis encuentros con M se hicieron cada vez mas frecuentes, y sucedpia que en medio de la rumba y cuando ya tenía bastantes tragos encima le daba la abrazadera y empezaba a decirme que me quería mucho, "cosas de borrachos" - pensaba yo- pero lo cierto es que me sentía inquieto por esas demostraciones de afecto.

En mi interior pensaba que M lo único que hacía era jugar conmigo, por mi mente ni siquiera pasaba la idea de que le gustaran los hombres, yo estaba seguro que lo único que quería era hacerme "caer" para después burlarse de mi....tan inocente que era uno!!!!

En cierta ocasión en que M estaba en un chupeteo superior al normal con su novia, la niña en cuestion le pidió a mi amiga-novia- compañera que la acompañara al baño, y mientras ellas andaban en su chismorreo, a M le dió por empezar con su misma abrazadera, sin embargo esta vez hizo algo que yo no esperaba: me besó en el cuello y me dijo que todos los besos que le daba a su novia me los quería dar a mi.....

Como ese día yo tambien tenía mas de un trago encima, me escuche a mi mismo diciendo: "Esta vez si te voy a aceptar el último trago en tu casa"; lo que pasa es que él siempre me reclamaba porque yo lo dejaba a él de primero y después a las niñas a sus respectivas casas, esta vez le dije que las cosas ivan a ser dierentes.

Nunca se me olvida que cuando me dió el primer beso en la boca: yo estaba manejando y casi nos chocamos, dí un frenazo en seco pero logré controlar el carro; "cosas de borrachos" -pense- pero la verdad yo ya estaba como la mariposa que se acerca a la llama.... SABE QUE SE VA A QUEMAR, pero sin embargo se sigue acercando sin importar lo que le pueda pasar guiada por un deseo que es mayor que su propia voluntad.

Llegamos a la casa de M y no había nadie... tampoco había trago y lo único que tenía que ofrecerme era leche.... "está bien" - dije yo- y me senté en una silla de la sala a ver como los cuadros de la pared del frente daban vueltas frente a mis ojos.

M apareció detras de mí con el vaso, sentí como sus manos descendieron por mi cuello y siguieron bajando para desabrochar los botones de mi camisa... un momento después me estaba besando el cuello; sentir el contacto de su lengua, su aliento cerca de mi oreja y sus manos acariciando mi pecho por dentro de la camisa me hicieron calentar.

Me siguó acariciando y yo dejándome; luego se me ubicó al frente.... y me plantó tremendo beso en la boca; yo ya me había besado con mi novia-compañera, pero esto era completamente distinto: sentí pasión, deseo, ganas de morder y de seguir... y fue cuando me di cuenta que ya tenía su pantalones abajo exibiendo el sexo en todo su esplendor; yo estaba sentado en la silla y él estaba de pié frente a mí, así que tenía una vista en primer plano de su pene ansioso y palpitante, que estaba precisamente.... a la altura de mi boca.

A pesar que yo nunca había hecho lo que empecé a hacer, era como si supiera exactamente como hacerlo y lo que se esperaba de mí; luego de un rato M me llevó a una habitación que no era la suya y estuvimos revolcándonos en la cama casi hasta el amanecer, en esa época yo era mucho mas joven y fogoso y alcanzó para varios ataques en la misma noche.

Yo había tenido otros intentos de primera vez que serán motivo de otro post; sin embargo esta si fué realmenre la primera vez que sentí plenamente el contacto de otra piel en mi piel y me pasé todo el día siguiente con su noche pensando en aquella experiencia con sentimientos de culpa y placer al mismo tiempo; como me daría cuenta mas adelante son los típicos sentimientos que siente cualquier hombre que duda si le gustan los manes y luego de probar ya no le queda ni la menor duda.

M y yo continuamos haciendo ejercicio (dentro y fuera del gimnasio), y nunca se cumplió mi terrible temor de que se burlara de mí por "caer" en sus garras.

Mucho, pero mucho tiempo después me enteré sin haber preguntado que M había hecho una apuesta de caballeros con H para ver quien de los dos "coronaba primero a Monchis", y aunque M conquistó.... perdió la apuesta y le salió completamente distinto a lo que él se había imaginado; pero eso será tema de otro post.



Mensaje para M: si alguna vez lees esto, quiero de sepas que no he olvidado que la Morphide es tu mariposa favorita, y que fué el segundo regalo que te dí hace ya mucho pero mucho tiempo... el primero fué mi inocencia.



Posdata: Muchos saludos a mis parceros Thorin y Joker por su mensaje de felicitación en el cumpleaños de mi blog; este nuevo año si vengo con todo!!!